Teotihuacan, la Pompeya de América

«Es como nuestra Pompeya», explicó ayer el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, Alfonso de María, durante la presentación de la exposición «Teotihuacan. Ciudad de los dioses». Organizada en colaboración con la Obra Social «la Caixa», la muestra, que reúne más de 400 piezas —entre cerámicas, armas, instrumentos musicales, máscaras y murales...—, algunas de reciente descubrimiento, ha pasado ya por París, Berlín, Roma y Barcelona, y la han visitado medio millón de personas. En Madrid se podrá ver hasta el 13 de noviembre.
De María indica que la primera restauración e investigaciones del complejo arqueológico comenzaron en 1910, «cuando se celebró el primer centenario de nuestra independencia y se organizó un congreso de americanistas». Desde entonces numerosos objetos ha salido a luz para explicar la estructura económica y social de esta ciudad-estado, «sofisticada y muy bien organizada».
La muestra se ha organizado en seis ámbitos que recorren diferentes aspectos, como la construcción de la ciudad, a través de los utensilios que se utilizaron; la política, la jerarquía y el comercio, el culto religioso —sus dioses principales fueron Tláloc, de la lluvia y la fertilidad, y la serpiente emplumada. La exposición también se detiene en la vida en los palacios, en el importante papel de los artesanos —actividad a la que se dedicaba el 20% de la población—, su relación con otras culturas y su desaparición o «colapso».
Susana Gaviña, Madrid: Teotihuacan, la Pompeya de América, ABC, 27 de julio de 2011