El museo Reina Sofía, a examen por los artistas

ABC pregunta a diez creadores por los 20 años de existencia de este centro:

1. A su juicio, ¿el Museo Reina Sofía representa de forma certera y adecuada el arte contemporáneo en su colección permanente? ¿La ha visitado ya? ¿Le gusta?

2. ¿Le interesan sus exposiciones temporales? ¿Qué echa en falta y qué cree que le sobra al MNCARS?

3. ¿Cree que el Reina Sofía se sitúa al mismo nivel que los grandes museos internacionales de arte contemporáneo?
«El asesinato de Marcel Duchamp». ÓSCAR DEL POZO
MARINA NÚÑEZ. ARTISTA VISUAL

1. Salvo excepciones, no es una colección de obras excelentes, sino correctas. Hay aproximadamente un 10% de obras de mujeres, y no creo que estas cifras varíen enormemente en la parte de arte contemporáneo. Es un desajuste terrorífico, muy desalentador, casi inconcebible, sin duda intolerable. Un recorrido propuesto para visitar la colección, «Feminismos», intenta visibilizar el tema, pero hay que paliar las deficiencias de modo más profundo.

Echo mucho de menos exposiciones temporales de tesis potentes, de esas que generan discurso y suscitan entusiasmo, las que marcan un momento, las que suponen alguna diferencia.

3. No me parece comparable al Pompidou, al MoMA, a la Tate. Es lógico en términos de colección. Mi respuesta se debe sobre todo a las exposiciones temporales, donde sí veo posible situarnos al máximo nivel.

JOSÉ MANUEL BALLESTER. PINTOR Y FOTÓGRAFO

1. Hasta la fecha, tiene la misión de centrar sus esfuerzos en el siglo XX y en el siglo XXI. Con el tiempo se complicará esta doble faceta y tendrá que definirse en un solo plano. Lo más lógico es que acabe centrando su función en el siglo XX y que vaya cediendo aspectos más experimentales y propios del arte más reciente a otras instituciones. Pero hasta ahora ha llevado con bastante acierto esta difícil dualidad.

2. La exposición «Procesos», que anunciaba un compromiso con la investigación en las nuevas tecnologías aplicadas al arte, no tuvo continuidad y he echado en falta también una conexión con el mundo de la docencia.

3. En pocos años ha obtenido grandes logros y puede medirse en el escenario internacional con muchos museos. Aun así nos queda un recorrido inmenso en el contexto de la cultura latinoamericana y su proyección por el mundo.

JUAN USLÉ. PINTOR

1. Solo he visto la colección una vez y en términos generales me gustó, sobre todo la parte de las vanguardias históricas hasta los años 60. La parte dedicada a los 70, 80 y contemporáneo la entendí como algo más deshilvanado o provisional.

2. Del MNCARS no creo que sobre nada: los proyectos artísticos serios y las colecciones son un estado de proceso permanente, siempre en construcción y depuración.

3. El Reina nace con la idea de ser un gran museo, y con sus más y sus menos lo es. Es conocido en todo el mundo. Estamos ante un futuro, no digamos que fácil, pero sí esperanzador. Tenemos por primera vez una dirección elegida por concurso y libre de dedos que lo nombren o lo destituyan. Yo soy optimista y espero que los museos —¡por favor!— no se conviertan todos, aún más, en centros para la cultura y el entretenimiento.

LUIS GORDILLO . PINTOR

1. La parte de la Colección Permanente que está en la segunda planta del edificio Sabatini me parece un gran logro.

2. Las exposiciones temporales, en general, me interesan mucho. Echo en falta una mayor atención al arte español y su apoyo en el exterior.

3. Creo que puede situarse en breve a ese nivel.

RAFAEL CANOGAR . PINTOR

1. La dirección del Reina busca, creo que acertadamente, dotar de una doble lectura a nuestro Centro: su propia identidad como Museo Nacional, al mismo tiempo que insertarse como centro del arte internacional y darnos una visión de la globalización de la cultura de hoy.

2. Me interesan mucho sus exposiciones temporales, y procuro ir siempre que puedo. Un museo de arte contemporáneo se fundamenta tanto en su colección como en sus muchas otras actividades, algunas tan fundamentales como sus exposiciones temporales.

3. El Reina es, sin duda, uno de los grandes museos. Al ser relativamente joven, adolece de ciertas obras de difícil adquisición, por precio o escasez en el mercado. Pero tiene, en cambio, una magnífica colección de nuestros grandes artistas: Picasso, Miró, Julio González, Juan Gris, Dalí, etc., que marcan nuestra identidad.

DORA GARCÍA . ARTISTA CONCEPTUAL

1. Yo solo pido que el arte contemporáneo se presente de forma inteligente, respetuosa con las obras y consecuente a la vez que sorprendente. En mis dos últimas visitas, en este año anterior, me lo he pasado muy bien visitando la colección de este museo. No había sido el caso desde hace mucho tiempo.

2. Sí, en estos momentos me interesan bastante sus exposiciones temporales. Pero no soy una visitante tan frecuente (quizás una vez cada seis meses) como para saber qué le falta y qué le sobra a su programa de exposiciones temporales.

3. Los grandes museos internacionales no siempre conocen la misma brillantez. El MNCARS ha conocido momentos muy difíciles, y esto lo sé yo bien, que hice allí un proyecto en 2005. Realmente, me he sentido muy bien en este museo durante el último año; me he reído, me he sorprendido, he descubierto cosas.

TXOMIN BADIOLA . ESCULTOR

1. Creo que la instalación de la colección permanente del museo representa bien al arte moderno, así como a las vanguardias de después de la guerra mundial hasta los años 70, y muy deficientemente al arte contemporáneo; de hecho, no está representado en absoluto el arte producido en las tres últimas décadas. Otro aspecto que pienso que se debería mejorar es el de la política de compras.

2. Hay de todo. En general me parece bien la recuperación de artistas poco conocidos. Me resultan más cansinas las exposiciones con tesis, en las que muchas veces las obras no pasan del carácter de ilustración. Echo de menos una política más coherente y continuada de exposiciones de artistas españoles.

3. Creo que, tras un impassede unos años, el museo vuelve a estar en una situación equiparable a la de otros grandes museos internacionales.

MARTÍN CHIRINO . ESCULTOR

1. Creo que es una mirada exótica de la historia del arte del siglo XX. Los nuevos gestores del arte hoy en día prefieren la vía mediática y, por lo tanto, el «éxito rápido» en detrimento de tiempos históricos en los que la reflexión y el pensamiento eran fundamentales.

2. Le falta una reflexión demorada sobre los momentos de la creación de nuestro país, tiempos difíciles no sólo desde el punto de vista estético, sino que además estaba agraviado por la circunstancia político-social. Cambiar el curso de la historia es un grave error, sea cual sea su reinterpretación. Nosotros, como generación, «quisimos ser y somos».

3. Hoy en día, con toda naturalidad se confunden fácilmente museos y espacios alternativos, lo que dificulta la gestión. Por lo tanto, creo que el Museo Reina Sofía se sitúa dentro de esta confusión de los tiempos en que vivimos.

EULÀLIA VALLDOSERA . VIDEOARTISTA

1. No he visitado la colección permanente, pero cayó hace unos años en mis manos un catálogo y constaté que no había una sola artista mujer. Creo que se está subsanando.

2. Mucho, a pesar de su extrema diversidad. Muchas de las propuestas carecen de continuidad, como si la investigación que conllevan terminara con la exhibición y el catálogo. La muestra de Val del Omar debería abrir un generoso debate en nuestro país. Sólo así es posible que este artista adquiera trascendencia fuera de nuestras fronteras.

3. Antes que competir en un contexto internacional debería preocuparnos qué diálogo establece con los centros locales. El Reina debería ser parte de una red que alcanzara todas las provincias españolas, e hiciera una labor hacia dentro. En cuanto a las fórmulas expositivas, a menudo no veo mucha diferencia entre la política de una gran museo y la de una galería privada.

IGNASI ABALLÍ . FOTÓGRAFO

1. He visitado la actual presentación de la colección y creo que es la mejor que se ha hecho hasta este momento. Es muy clara la percepción de proponer una lectura diferente a partir de las obras que el museo tiene, vinculándolas a otras manifestaciones culturales que tenían lugar en cada momento, y buscando relaciones entre ellas más allá de la cronología o las similitudes estilísticas o formales.

2. He percibido un cambio radical respecto a etapas anteriores. Me ha interesado lo que he visto cuando he visitado las exposiciones. Plantean una densidad de contenido y una puesta en escena muy rigurosas y exigentes. El espectador deja de ser considerado sujeto pasivo.

3. Sí, creo que el Reina Sofía está al nivel de los mejores museos internacionales, con una clara apuesta por una construcción de la historia del arte a partir de lo periférico y mirando más hacia el presente y el futuro que hacia el pasado.

ABC / Mádrid: El museo Reina Sofía, a examen por los artistas, ABC, 30 de octubre de 2010