El edificio de Herzog & De Meuron ya alberga TEA, Tenerife Espacio de las Artes

A diferencia de otros estudios arquitectónicos, Herzog & De Meuron no suelen copiarse a sí mismos y nunca dejan indiferentes. Algo que ya han demostrado con edificios tan distintos como el estadio nido de Pekín, el de Múnich, el de Basilea o el Epicentro Prada Auyama en Tokio.

En Tenerife, después de inaugurar hace apenas unas semanas una renovada y deslumbrante plaza de España -como anticipo de lo que será su nueva fachada marítima para la ciudad-, sorprenden una vez más con un edificio audaz que no se parece en absoluto a sus otras dos grandes obras en España: la sede del Fórum en Barcelona y CaixaForum en Madrid. En un emplazamiento difícil, estrecho, lleno de limitaciones, con una inclinación imposible, a orillas de un barranco y en pleno centro urbano, han creado quizás la que sea hasta el momento su obra más redonda, imaginativa y estimulante en nuestro entorno. No era sencillo integrar una gran biblioteca pública, un museo de arte contemporáneo y un Centro de Fotografía en un solo edificio, rodeado a su vez de otros museos que es lo que representa TEA, Tenerife Espacio de las Artes.

Pero el resultado no puede ser más brillante, habiendo creado una estructura casi aérea que aprovecha al máximo su horizontalidad. El elemento aglutinador es una nueva vía publica en forma de rampa que corta por el medio el edificio, no sólo atravesándolo de un extremo a otro, sino también creando una inmensa plaza triangular en su recorrido que realza el carácter público y multiuso del proyecto. Desde fuera, sus inmensas paredes que fugan hacia el infinito, pueden dar un aspecto de búnker al conjunto pero sólo hay que mirarlo una segunda vez para descubrir los cientos de vanos en forma de inusitadas troneras que permiten que la luz natural se filtre en su interior. Para las noches Herzog y De Meuron se han superado a sí mismos, sorprendiendo con luminarias que se transforman en etéreos elementos arquitectónicos de una estructura versátil, cargada de sorpresas pero siempre al servicio de la función del edificio.

Para la inauguración su director, Javier González de Durana (ex director de Artium, Museo Centro de Arte Contemporáneo de Álava) ofrece un primer acercamiento a la colección del Instituto Oscar Domínguez a través de propuestas alrededor de una idea como 'Figuras reclinadas/ Cuerpos tumbados' que se inspira en una obra del mismo Domínguez y otra de Henry Moore, además de una sugerente exposición en torno al concepto del Cosmos y nuestros orígenes, en las artes plásticas (De Kupka a Kubrick) y otra, 'Arma Visual' sobre fotomontajes soviéticos entre 1917 y 1953.

Como comentó (en español) Jacques Herzog en una multitudinaria inauguración cuajada de personalidades de la arquitectura, las artes plásticas y 'la realeza', este edificio va a cambiar definitivamente la imagen que se tiene de Tenerife -que ya contaba con un auditorio tan carismático como el diseñado por Santiago Calatrava-, colocándola en el circuito internacional de la CULTURA en mayúsculas.

Javier Mazorra, Santa Cruz de Tenerife: El edificio de Herzog & De Meuron ya alberga TEA, Tenerife Espacio de las Artes, El Mundo, 3 de noviembre de 2008 (Foto: Javier Mazorra)