Conjuntos templarios egipcios

Templo de Isis en Philae

File o Philae es el nombre de una isla de Egipto, en el río Nilo, situada a 11 km. de Asuán. Fue célebre por los templos erigidos durante los periodos ptolemaico y romano dedicados al culto a la diosa Isis que se propagó por todo el Mediterráneo, manteniéndose su veneración en el templo de File hasta que fue prohibido en tiempos de Justiniano I, el año 535 d.C.

Antes de que fuera sumergida en las aguas de la presa de Asuán, los templos de File fueron desmontados, trasladados y reconstruidos en el cercano islote de Agilkia. Los templos forman parte del Museo al Aire Libre de Nubia y Asuán, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1979 con el nombre de Monumentos de Nubia de Abu Simbel a File.

El conjunto del templo de Isis dispone de varias edificaciones:

  • El vestíbulo de Nectanebo I, con sillares de época de Taharqo
  • El templo de Arensnufis, divinidad meroítica. De tiempos de Ptolomeo IV Filópator y Arqamani, rey de Meroe.
  • Las columnatas de época de Augusto y Tiberio.
  • La capilla de Mandulis, divinidad nubia.
  • El templo dedicado a Imhotep, sabio divinizado de la época de Dyeser.
  • La puerta de tiempos de Ptolomeo II Filadelfo
  • El primer pilono, con los obeliscos de Ptolomeo VIII Evergetes.
  • El patio con el mammisi, de Ptolomeo VIII, terminado por Tiberio.
  • El templo de Isis, decorado en época de Ptolomeo II, terminado por Augusto y Tiberio.
  • El templo de Hathor, de Ptolomeo VI Filómetor y Ptolomeo VIII Evergetes.
  • Al oeste está la llamada puerta de Adriano, al pasar por la cual se llega a la capilla principal y al templo de la diosa Hathor, al este del templo de Isis. Los pilares están decorados con escenas de músicos, bailarines y dioses. Al suroeste está el quiosco de Trajano.

Templo de Horus en Edfú

Edfú (en árabe, إدفو) es una ciudad egipcia situada en la ribera occidental del río Nilo, en un amplio valle, lugar óptimo para el asentamiento humano por quedar a salvo de las anuales inundaciones del Nilo. Tiene cerca de 50.000 habitantes. Está situada unos 90 km. al sur de Luxor. Su primer nombre fue Uetyeset-Heru "El lugar donde Horus es alabado". Después se llamó Dyeba "Ciudad de la retribución", que en copto será Etbó, de donde proviene el nombre actual de Edfu. Fue el lugar donde la tradición sitúa la batalla entre los diose Horus y Seth. A partir de la dinastía V aparece con el nombre de Behedet. Fue capital del nomo II del Alto Egipto siendo ya importante en el Imperio Antiguo. Era origen de las caravanas que partían hacia el oasis de Jarga, al oeste, a las minas del desierto oriental y a la costa del mar Rojo, al este. Los descubrimientos más antiguos se datan durante la dinastía III pero el lugar debía estar habitado con anterioridad.

Es tradición que Imhotep, el diseñador de la Pirámide escalonada de Saqqara, hizo un templo en Edfu dedicado a Horus. Con la dinastía V toda la región pasa a llamarse Behedet, o Behdet, y el dios fue adorado como Horus Behedet. Del periodo de la dinastía VI se ha encontrado la tumba de uno de los nomarcas, de nombre Isi, "gran jefe del nomo del trono de Horus", que vivía más o menos en tiempos de Pepy I, que llegó a ser adorado como un dios durante el Imperio Medio. Con la dinastía X aparece un soberano de nombre Anjtify, que fue gobernador del III nomo (Ten, capital Nejen) y se apoderó de Behedet después de derrocar al monarca, llamado Juy que era aliado de los tebanos.

En el Imperio nuevo, algunos faraones, como Ramsés II y Shabako, construyeron en la ciudad.

En tiempos grecorromanos la ciudad se llamó Apolinópolis Magna, en griego πόλις μεγάλη Ἀπόλλωνος, en latín Apollonos Superioris, ya que Horus era identificado con Apolo.

El templo ptolemaico de Horus

Les principales construcciones lágidas en Egipto fueron el templo de Isis en File, el de Hathor en Dendera, y el de Horus en Edfu, siendo este el primero que ordenaron construir en Edfu. El templo ptolemaico de Horus es el mejor conservado de Egipto y fue llamado Mesen, “El lugar del arpón”, “La Casa de Ra”, Nedyem Anj, “Placer de vivir dentro”, “La ventana del halcón”, “El altar de Horus”, y Uetyeset, “El lugar para alabar a dios”.

El edificio principal fue llamado Behedeti. La construcción comenzó el 23 de agosto de 237 a. C. bajo el mandato de Ptolomeo III Evergetes; en 206 a. C. la construcción se detiene por una revuelta de dos príncipes de la zona de Tebas que se declararon independientes de los faraones lágidas; finalmente el templo fue consagrado por Ptolomeo VII Neo Filopator y su esposa Cleopatra II.

La sala hipóstila exterior, con doce columnas, da paso a la biblioteca, que era a una pequeña habitación; otra habitación al oeste estaba dedicada a consagrar a los sacerdotes; la entrada al pronaos se abría a un largo patio rodeado por tres lados de columnas y al sur por un alto pilono. La parte más sagrada era el altar con una estatua; el santuario estaba rodeado de setenta habitaciones y almacenes, una sala con ocho pilares, dos pequeñas salas y dos escaleras. La capilla albergaba la barca sagrada; Ocho capillas más en un corredor que llevaba fuera del santuario estaban dedicadas probablemente a los dioses principales: Isis, Osiris, Min, Jonsu, Ra, y otros tres más.

Delante del santuario hay una antesala, y al este una sala de sacrificios, dando paso a la plaza de la pureza donde se revestía a las estatuas y se recibían los amuletos; al oeste, otra antesala estaba dedicada a Min; la siguiente habitación en dirección a la salida era la de las ofrendas y seguía la sala hipóstila interior con dos grandes columnas; dos salas adjuntas servían como paso interior hacia el templo, y para almacenar los tesoros; las cámaras adyacentes, en el oeste, eran para las abluciones y los aceites sagrados, y la cámara sagrada del Nilo donde se purificaba el agua del nilómetro exterior. Una sala hipóstila de 18 columnas se añadió al sur, así como unas puertas, en 57 a. C. quedando el templo concluido.

Si bien el templo está completo, las dependencias anexas como el lago sagrado, cocinas, almacenes, oficinas, el lugar de los halcones y otras dependencias fueron absorbidas por la ciudad.

Durante la dominación romana fue sede de la Legión II Trajana. En el periodo cristiano fue sede episcopal.

Auguste Mariette fue el primer occidental que llegó a Edfu, en 1860. Entonces el templo se utilizaba como vivienda y había establos y almacenes de productos agrícolas. Se habían hecho paredes de adobes y algunas zonas estaban recubiertas de arena. Los trabajos de conservación que se hicieron permitieron recuperar el templo.

Concepto Edfu en la Wikipedia


Templo de Medinet Habu, Tebas, Luxor

En Medinet Habu, pequeño pueblo situado a poco más de dos kilómetros al sur del Ramesseum, se encuentra el templo de Tebas mejor conservado, con unas superficies decoradas que ocupaban unos 7.000 metros cuadrados. Este complejo templario no solamente está formado por el templo de Ramsés III, sino que posee una serie de estructuras de distintos períodos tanto anteriores como posteriores.

Los antiguos egipcios llamaban a este lugar Djanet y, según la tradición, está considerado un lugar sagrado mucho antes de que Ramsés edificara su templo funerario. Medinet Habu es uno de los primeros lugares de la zona tebana en ser asociado con el dios Amón.

El complejo templario estaba rodeado por una muralla en cuya entrada principal se construyó una torre en forma de migdol (fortaleza militar de Asia Menor) que daba al templo una apariencia de fortaleza y cumplía funciones de protección en la gran muralla que lo circundaba. Delante de esta puerta fue excavado un atracadero, conectado al Nilo por medio de un canal; aquí anclaban las barcas sagradas, que llevaban en procesión las imágenes de las divinidades, y la nave real, en la que llegaba el soberano desde su residencia en el delta para participar en las fiestas. La torre de esta entrada oriental está decorada con escenas representando a Ramsés III derrotando a sus enemigos, así como realizando ofrendas a las divinidades.

A través de esta puerta se adentra en un gran espacio que precede al primer pilono del templo principal, y un poco a la izquierda están los restos de varias capillas funerarias construidas durante la XXV y la XXVI Dinastías para las Divinas Adoradoras de Amón. La primera capilla, dedicada a Amenardis, es la que se conserva mejor. A la derecha de esta entrada se encuentra el templo de Amón de la XVIII Dinastía. Este templo fue víctima de repetidas usurpaciones y ampliaciones a lo largo de los tiempos. Su construcción fue la inició Amenhotep I, si bien el núcleo de este templo es de Hatshepsut y Tutmosis III. Este edificio pasó a ser la única parte del complejo que siguió funcionando con el discurrir de los años.

Al norte de este Pequeño Templo se encuentra un lago sagrado y el llamado “nilómetro” mandado construir por Nectanebo I.

El templo principal del complejo, llamado El Templo de User-Maat-Re Meriamón (el nombre que tomó Ramsés III al subir al trono) y que significa “Unido Eternamente a la Posesión de Amón en la Tebas Occidental”, es parecido en cuanto a su estructura al Ramesseum. El pilono de entrada, que presenta cuatro orificios donde iban las astas con las banderolas, estaba magníficamente decorado con imágenes colosales del faraón entregado a la matanza ritual de enemigos nubios y libios delante de Amón-Ra Herajti (torre del norte) y asiáticos delante de Amón-Ra (torre del sur).

Primer pilono del templo de Ramsés III

Las paredes laterales exteriores del templo, de más de tres metros y construidas en piedra, también representan importantes episodios de batallas y victorias que libró el faraón contra los pueblos del mar y los libios. Estos temas se repiten en el primer patio. Este patio tiene sobre el lado norte una alineación de siete pilastras, en cada una de las cuales se apoya un coloso con los rasgos del faraón. En el lado opuesto, una fila de columnas forma un pórtico de ingreso al palacio real situado detrás.

A través del segundo pilono se pasa al segundo patio al que se le denominaba “Patio de las Fiestas”, y que estaba rodeado por un peristilo. Tanto el pórtico oriental como el occidental estaban decorados por ocho estatuas osiríacas que fueron destruidas a comienzo de la era cristiana por los coptos. Los pórticos del norte y sur están sustentados por columnas papiriformes. En los relieves de las paredes siguen apareciendo temas militares, pero hay también escenas de rituales dedicados a Sokaris-Osiris y a Min, dios de la fertilidad itifálica, así como de los hijos de Ramsés III.

La primera sala hipóstila, compuesta por 24 columnas de las que se conservan la base, tiene al sudoeste cuatro cámaras cuya finalidad debía de ser albergar el tesoro del templo, según se desprende de los bajorrelieves que representan montones de oro, plata y piedras preciosas. La segunda y tercera salas hipóstilas tenían estructuras idénticas, sostenidas por ocho columnas y con un conjunto de cámaras laterales destinadas al culto de diversas divinidades. El templo estaba rodeado, en tres de sus lados, por edificios dedicados a viviendas, almacenes y oficinas.

Al igual que en el templo de Seti I y en el Ramesseum, Ramsés III construyó un palacio real contiguo al templo. Lo ubicó en la parte meridional, entre el primer y segundo pilono, y tenía comunicación directa con el primer patio del templo a través de la Ventana de las Apariciones, que el farón utilizaba para aparecer en público.

No se sabe a ciencia cierta si el palacio era solo una construcción simbólica y ritual, o si verdaderamente lo utilizaba el faraón para presidir las ceremonias religiosas importantes.

Tras la muerte de Ramsés III, Medinet Habu pasó a convertirse en centro administrativo de la rigión tebana. Bajo el reinado de Ramsés XI estalló un conflicto entre el clero de Amón y el virrey de Nubia. Este último invadió el Alto Egipto y atacó el complejo de Medinet Habu, donde había buscado refugio la población, destruyendo casi completamente la puerta fortificada occidental. Durante la XXI Dinastía, Tebas se convirtió en capital de un estado independiente, y el templo de Ramsés III volvió a convertirse en sede de la administración.

Hacia el siglo IX a. C. se construyeron tumbas de nobles en el interior del recinto e incluso del templo mismo. En época copta, entre las ruinas del templo se fue creando una ciudad, que con el paso del tiempo se fue ampliando extramuros, llegando en el momento de apogeo a superar los diez mil habitantes.

Excavaciones en la zona

Las primeras información científicas y detalladas (incluso con reproducciones gráficas) de Medinet Habu fueron recogidas por la expedición napoleónica, en 1.801. Champollion y Lepsius visitaron esta zona, copiando parte de las inscripciones y representaciones del templo. En el año 1.859 Auguste Mariette, entonces Director del Servicio de las Antigüedades, decidió realizar una exploración sistemática, confiando el encargo a Bonnefoy, que murió de una insolación, mientras estaba en la cantera de excavación. Su trabajo lo continuó Gabet. Después de un período de abandono, las excavaciones se retomaron por el Servicio de Antigüedades en 1.889, bajo la dirección de Georges Daressy, cuya misión era hacer los monumentos de Medinet Habu accesibles a los visitantes. Estas excavaciones finalizaron en 1.899, pensando que ya nada que mereciera la pena quedaba por excavar. Pero, como ocurrió en otros muchos lugares de Egipto, las excavaciones clandestinas encontraron azulejos esmaltados, que fueron puestos a la venta llegando a los museos norteamericanos y europeos, y esto provocó que se volviera a despertar el interés por la zona. Gaston Maspero, Director del Servicio de Antigüedades en aquel entonces, envió a Theodore M. Davis, con el encargo de descubrir si en el interior del recinto amurallado se encontraban edificios importantes. Davis encontró bases de columnas, jambas de piedra y el podio de un trono. Estos descubrimientos permitieron identificar el palacio de Ramsés III.

Breasted, en los años veinte del siglo pasado, promovió una iniciativa para preservar inscripciones y representaciones de gran importancia desde el punto de vista histórico y arqueológico. Nació así el Reconocimiento Epigráfico y Arquitectónico de Egipto, financiado por el Oriental Institute de Chicago. El proyecto inicial tomó como banco de pruebas el complejo funerario de Ramsés III. Los resultados obtenidos llevaron a la decisión de retomar las excavaciones. Fue nombrado director de las excavaciones Uvo Hölscher que comenzó las investigaciones en 1.927. En el año 1.970 finalizó este gigantesco proyecto que dio lugar a la publicación de cinco volúmenes que contenían la relación de las excavaciones llevadas a cabo por Hölscher, y ocho que recogían 660 tablas en blanco y negro y en color, reproducciones de las escenas copiadas de los muros del templo y de puerta fortificada de este.

Bibliografía

  • Grandes descubrimientos de la arqueología (Editorial Planeta)
  • Alberto Siliotti - El Valle de los Reyes y los templos y necrópolis de Tebas (Ed. Martínez Roca, S.A. - Barcelona,1997
  • Richard H. Wilkinson - Los Templos del Antiguo Egipto (Ed. Distino, S.A.)
  • Egiptomanía (Editorial: Planeta DeAgostini, S.A.)
  • Atlas culturales del mundo-Egipto (Ediciones Prado)
Texto: Pedro Mancebo Mancebo
Enlace: http://club.telepolis.com/pmmancebo/medinet_habu.htm

Fuentes: