Ghirlandaio y Turner: ¿cuál será el número 1?

Turner: Tormenta de nieve, 1842Ambos son nombres de referencia de la historia del arte y exposiciones de visita obligada. La primera la encontramos en el Museo Thyssen-Bornemisza con el título Ghirlandaio y el Renacimiento en Florencia y ofrece un recorrido por el arte florentino del Quattrocento que tiene, como punto de partida, uno de los iconos de la colección del museo: el retrato de GiovannaTornabuoni. En torno a él, la muestra reúne un selecto conjunto de sesenta obras, tanto pinturas como esculturas, dibujos, manuscritos, medallas y objetos varios, para ilustrar el arte y la cultura en la Florencia de finales del siglo XV.

La segunda, Turner y los maestros, la podemos ver en el Museo del Prado. La exposición, en colaboración con la Tate Britain londinense y el Grand Palais de París, plantea por primera vez un diálogo entre las obras más relevantes del artista, las de los maestros de otras épocas y los de la suya propia. Una muestra, con más de 80 obras procedentes de instituciones y colecciones europeas y norteamericanas, donde se incluyen algunas novedades con respecto a las muestras de Londres y París.

Nuevos en lista

Mientras que espacios como la Fundación Telefónica siguen cerrados y cuando casi la totalidad de galerías hacen parón estival y aguardan a primeros de septiembre para ofrecer su nuevo programa de exposiciones, hay otros espacios, hasta ahora cerrados, que reabren con algunas de las ofertas más apetitosas. Y de comida va la cosa.

El Palacio de Velázquez, ubicado en el parque del Retiro y dependiente del Museo Reina Sofía, reabre tras varios años cerrado por reformas, con la exposición Miralda, un recorrido por la trayectoria artística de este artista que ha hecho del alimento su principal fuente comunicativa. Desde sus primeros dibujos y fotografías de 1965, pasando por una selección de documentos, dibujos preparatorios, fotografías, esculturas/monumentos y objetos, hasta proyecciones de películas e instalaciones con montajes fotográficos. Aunque la oferta del Reina Sofía no termina ahí. En el espacio del Palacio de Cristal, Jessica Stockholder propone juegos de palabras, visuales y verbales, con Atisbar para ver. Un mundo construido por la asociación de objetos cotidianos que proponen nuevas lecturas con las que reinventarse.

Espacios compartidos en el Reina

Y precisamente eso, parece haberse convertido en el lema del Museo Reina Sofía. Hasta cinco exposiciones comparten espacio en el museo con la intención de contaminarse. La última en inaugurar es Nuevos Realismos: 1957-1962. Estrategias del objeto, entre readymade y espectáculo ofrece, hasta el 4 de octubre, una revisión de los años 1957 y 1962, artísticamente hablando, lleno de transformaciones y virajes. La muestra comienza con la culminación de la modernidad y termina con la cúspide de la posmodernidad. Una ruta que va desde el triunfo de la pintura abstracta a la consolidación del arte pop americano.

Enmarcada dentro del festival PHotoEspaña y con largas colas y éxito de visitas, Manhattan: uso mixto es una de las exposiciones más interesantes de las que oferta la escena artística madrileña. Con más de cuarenta artistas y comisariada por Lynne Cooke y el prestigioso crítico de arte y comisario americano Douglas Crimp, la exposición propone un recorrido visual por el Nueva York de los años setenta, especialmente por el Soho, convertido desde entonces en una meca para artistas y galerías de arte. Sigue en cartel Principio Potosí hasta el 6 de septiembre con su relectura crítica de las dinámicas del capitalismo global y, hasta finales de agosto, puede visitarse también Desvíos de la deriva. Experiencias, travesías y morfologías.

Con dos años ya de andadura en la localidad de Móstoles, el Centro de Arte 2 de Mayo presenta, hasta finales de agosto, Fetiches críticos: Residuos de la economía general, la primera entrega de los proyectos de El Espectro Rojo, un núcleo que opera desde la ciudad de México conformado por Mariana Botey, Helena Chávez Mac Gregor y Cuauhtémoc Medina, que busca explorar la intersección entre prácticas artísticas y teóricas, desde una perspectiva política, postcolonial y poética.

Hasta finales de mes también está abierta la exposición Claves & Thighs de Juergen Teller en la sala Alcalá 31, los últimos trabajos de Fernando Sánchez Castillo y las exposiciones de Moholy-Nagy y Robert Capa en el Círculo de Bellas Artes. En la Sala del Canal de Isabel II, de la Comunidad de Madrid, encontramos el universo creativo de Isabel Muñoz que, galardonada con el premio de fotografía de la Comunidad de Madrid en 2006, propone un recorrido visual ayudada por la cofradía Al Qadiriya, de Iraq, y sus integrantes, que buscan a Dios utilizando, entre otros, el baile y la autoflagelación.

Una de las exposiciones de este verano es la Subversión de las imágenes. Surrealismo, fotografía y cine que propone la Fundación MAPFRE, una muestra con más de 400 obras (300 fotografías, un centenar de documentos y 10 películas prestadas por colecciones públicas y privadas de todo el mundo) organizada en 10 secciones que arranca con las acciones colectivas que tan fundamentales fueron entre los surrealistas.

Carácter documental

La Casa Encendida deja en verano una exposición de claro carácter documental sobre el conocido como fenómeno del cine quinqui o de delincuencia juvenil en España, que vivió su apogeo entre 1978 y 1985, motivado por las transformaciones urbanísticas, sociales y económicas de esos años y que se convirtieron en le territorio germinal de un determinado tipo de delincuente, cuya figura acabó mitificándose. Con el título de Quinquis de los ochenta: cine, prensa y calle, la muestra llega a Madrid después de haber pasado por el CCCB de Barcelona.

También en La Casa Encendida vemos la colectiva resultado de la novena convocatoria del certamen Inéditos 2010, uno de los más importantes de Europa en su campo. Los ganadores de este año son los comisarios Edu Hurtado con el proyecto Oscuro y salvaje; Roberto Vidal y Óscar Martín con De Zines y Rosa Lleó y Zaida Trallero con Everything is out there, un proyecto que rinde homenaje al trabajo del alemán Hans Peter Feldmann (1941), cuyo trabajo será el próximo septiembre uno de los platos fuertes del Museo Reina Sofía.

También los artistas de la Casa de Velázquez serán protagonistas este verano de una muestra colectiva, Itinerancia UNO que, tras haber pasado por el Círculo de Bellas Artes y la fundación Medinaceli DEARTE, viajará a Zaragoza y París.

Bea Espejo: Ghirlandaio y Turner: ¿cuál será el número 1?, EL MUNDO / El Cultural, 3 de agosto de 2010