Pintura rupestre paleolítica de una Venus en Cabra (Córdoba)

En nuestras indagaciones en la red hemos podido rescatar una interesante noticia que informa sobre la extensión del panorama geográfico del arte prehistórico a lugares insospechados hace algún tiempo. Aquí la reproducimos.

"El conocimiento que hasta el momento presente se tiene en el continente europeo sobre las representaciones pictóricas prehistóricas femeninas, se verá revolucionado a partir de los resultados que se obtengan del estudio de la que se puede denominar la Venus egabrense existente en la Cueva del Calvario de Cabra y que realizará todo un equipo científico bajo la dirección de los profesores Juan Carlos Vera de la Universidad de Huelva y Rafael Maura de la Universidad de Málaga, los mejores conocedores a nivel andaluz del arte paleolítico.

Así lo ha adelantado a Diario CORDOBA el arqueólogo y director del Museo Arqueológico de Cabra Antonio Moreno Rosa, expresando que para ello se está ultimando en estas fechas la redacción de un proyecto que se va a remitir a finales del presente mes de mayo a la delegación provincial de Cultura para que proceda a la autorización pertinente "debido al gran interés del delegado municipal de Cultura Javier Ariza de retomar la investigación de esta cueva".

El hallazgo de esta pintura tuvo lugar en la década de los años ochenta del siglo XX como consecuencia del derrumbe de la cueva en la que se encuentra, producido por los trabajos realizados en la cantera de caliza ubicada en aquellos años en dicho lugar. Derrumbe y un posterior sellado de la cavidad, que ha salvaguardado la pintura cuya excepcionalidad -y que a falta del estudio, podría aclarar si se trata de dos Venus- se encuentra en que en la península ibérica sólo existen representaciones de estas posibles deidades femeninas en la costa franco-cantábrica y los Pirineos, junto a otra en la provincia de Málaga. También aparecen figuras de este tipo en Francia y en Centroeuropa.

Según explicaba Moreno Rosa, la pintura está realizada mediante trazos carbonosos de color negro, esquemáticos y que representan de un modo idealizado la figura de una o dos mujeres, oscilando su tamaño entre los 40 y los 50 centímetros.

La datación de la Venus egabrense va por encima de los 15.000 años y se encuadra en el Paleolítico Superior, explicando el arqueólogo que se encuentra en lo que sería el final de la cueva a donde se accede por una entrada artificial en el techo, siendo muy difícil su acceso por el derrumbe antes mencionado, desconociéndose la que sería la entrada principal de la cueva. Uno de los objetivos que se persigue con este estudio es aparte de la valoración de las pinturas, la confección de una reproducción exacta para su exposición permanente en el Museo Arqueológico Municipal. A más largo plazo, añadía Moreno, se tiene la intención de actuar en el resto de la cueva, que se encuentra bajo el derrumbe y poder realizar una exploración."

José Moreno, Una Venus egabrense podría modificar el panorama del arte rupestre europeo, Diario Córdoba, 12 de mayo de 2006