Aparece un cuadro de Romero de Torres en una feria en Rute

Un cuadro hasta ahora desconocido de Julio Romero de Torres ha salido a la luz el pasado fin de semana en la Feria del Coleccionismo de localidad de Rute (Córdoba). El galerista que la presentó, Tino Tortosa, ha cifrado en un millón de euros el valor de tasación del cuadro, si bien ha matizado que "no está a la venta".Se trata de un lienzo al óleo y temple de una Dolorosa que ha sido autentificado por Mercedes Valverde, directora de los museos municipales de Córdoba y la mayor especialista en la obra del pintor cordobés, y que viene a formar parte de "su escasísima producción religiosa". En el cuadro se muestra a la Virgen María en primer término, con expresión de gran aflicción en un rostro surcado por lágrimas y con un pañuelo entre las manos unidas. Romero de Torres sitúa detrás el paisaje del monte Calvario, con las tres cruces y en el centro de ellas, la de su hijo Jesús. De la cima parte un arroyuelo. Los colores en tonos ocres y morados acentúan la tristeza en el cuadro, según Mercedes Valverde.

Valverde ha puntualizado que de Romero de Torres "se tenía conocimiento de una Dolorosa presentada en el Majestic Hall de Bilbao en 1919, en la primera exposición individual, pero esta composición es distinta". Además, la obra que se exhibió en la capital vasca se encuentra en paradero desconocido. Así, señala que en el archivo del museo dedicado al pintor hay "una foto de esa época donde aparece el rostro (de la Virgen) como boceto preparatorio para la ejecución del cuadro" que ha sido identificado en Rute. De otra parte, en un reciente programa televisivo sobre la Chiquita Piconera "sale una imagen de Romero de Torres pintando esa obra", que "cautiva por su expresión de profundo dolor".

Según comentó la directora de los museos, "cuando me pasaron el cuadro me llevé una gran sorpresa porque es completamente inédito", destacando que no hay duda de su autoría, pues va firmado por delante y por detrás del lienzo. Así, por ejemplo, durante los últimos años, en febrero del 2008 se autentificaba un retrato del torero Lagartijo, obra pintada en 1900 y que estaba en posesión de los descendientes del diestro; la muestra ´Mirada en sepia´, que se expuso en el Círculo de la Amistad en el 2006, contaba con un buen número de cuadros inéditos del artista cordobés. Entre ellos destacaba el retrato de la bailaora sevillana Pastora Imperio, que posteriormente salió a subasta en la sala Segre de Madrid con un precio de 190.000 euros, pero que finalmente se quedó sin comprador.

Mercedes Valverde ha calificado, igualmente, de "extraña" esta obra, pues a su descubrimento se suma "la escasa producción del artista en pintura religiosa", con apenas media docena de composiciones. De Julio Romero de Torres se conocen principalmente en ese ámbito los murales de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de la localidad jiennense de Porcuna -que representan una Sagrada Familia y una Santa Cena-, ´San Rafael Arcángel´, ´La Magdalena´, ´Samaritana´ y ´Salomé´. Quizás el más conocido en este ámbito sea el del custodio de Córdoba, un óleo sobre lienzo pintado en 1925. Una joven rubia representa al arcángel, estando a sus pies una mujer con mantilla y otra que le ofrece un ramillete de flores. Al fondo de esta composición se puede ver el paseo de la Ribera, el Puente Romano y la Calahorra.