Amistad y vanguardia en Londres

La galería Tate Modern de Londres presenta a partir del próximo 21 de febrero y hasta el 26 de mayo una exposición que documenta la obra de tres pioneros de las vanguadias del siglo XX: Marcel Duchamp, Francis Picabia y Man Ray. De origen social distinto, tenían también muy diferentes temperamentos, lo que no impidió que los tres se hicieran amigos de por vida, compartieran generosamente sus ideas y experiencias y, en contra de su individualismo, encontraran cada uno en el otro motivos de inspiración. Como señala en la introducción del catálogo la comisaria de la exposición, Jennifer Mundy, en el centro de su amistad había una visión común de la vida, un sentido profundo de la ironía, una afición a los gestos iconoclastas y un interés compartido por la sexualidad y el erotismo.

Mardel Duchamp, The Bride stripped naked by her bachelors, even (1915-23)

Un burgués, un provinciano y un hombre de ciudad

Picabia (1879-1953), rico de familia, amante de los coches veloces y de las mujeres, era pintor, prolífico polemista y le encantaba figurar siempre en primer plano en la vida cultural parisina. De origen provinciano, Duchamp (1887-1968), que estaba dotado de una mente dialéctica y aficionada a las especulaciones filosóficas, comenzó también pintando, pero pronto vio que con los tubos de pintura no podía expresar plenamente las ideas que le interesaban. Infinitamente curioso a la vez que cínico, Man Ray (1890-1976), nacido en Filadelfia (EE.UU.) de padres inmigrantes, pintó también toda su vida al igual que Picabia, pero adquirió sobre todo fama como fotógrafo y creador de objetos.

Francis Picabia, Otäiti (1930)

Diálogos íntimos: sexo y ajedrez

Aunque la amistad de los tres artistas comenzó antes de que surgieran el surrealismo y el dadaísmo, en realidad siempre quedarán asociados a este último movimiento en su vertiente neoyorquina. En diversos momentos de sus carreras, los tres artistas dialogaron entre sí, respondiendo cada uno de ellos a las ideas e innovaciones de los demás con un lenguaje siempre muy personal que reflejaba sus propias preocupaciones. Así, observa Mundy, difícilmente habría desarrollado Picabia un lenguaje de metáforas sexuales basadas en el maquinismo o habría creado Man Ray su obra en cristal Dancer Danger, de no haber sido por las conversaciones que uno y otro mantuvieron con Duchamp sobre la obra de este último La Mariée mise à nu par ses célibataies. Del mismo modo, la comisaria de la exposición se pregunta hasta qué punto el anarquismo de Picabia influyó en la decisión de Duchamp de retirarse temporalmente del mundo del arte para dedicarse a su gran pasión: el ajedrez.

Experimentos consagrados

Man Ray, The Rope Dancer Accompanies Herself with her Shadows (1916)

En la exposición también se mostrarán los readymades y experimentos ópticos de Duchamp, las rayografías (fotografías hechas sin ayuda de una cámara), de Man Ray, muchas de sus fotografías icónicas del período de entreguerras, así como pinturas al óleo tanto de Ray como de Picabia. También se proyectarán películas de los tres artistas, incluida la famosa Entr'acte (1924), con guión de Picabia y música de Eric Satie y en la que actúan todos ellos. La exposición de la Tate incluirá obras seminales de los tres artistas, entre ellas la famosa Desnudo descendiendo una escalera, de Duchamp (1912). I See Again in My Memory my Dear Udnie (1913-14), de Picabia, y The Rope Dancer Accompanies Herself with her Shadows (1916), de Man Ray.

EFE, Amistad y vanguardia en Londres, El País, 5 de febrero de 2008