Veranear en el museo

Un niño participa en un juego de pistas en el Museo del Prado. | Roberto Cárdenas

Con la llegada de las vacaciones escolares, las instituciones culturales abren sus puertas al público infantil. Sumergirse en las obras del Prado o el Thyssen, bucear entre las curiosidades del Polo Norte o empaparse del estilo de vida decimonónico son algunas de las propuestas que los museos de Madrid ofrecen a los más pequeños para seguir aprendiendo durante el verano mediante talleres y juegos.

Actividades en el Museo del RomanticismoLa exposición temporal 'Turner y los Maestros' será el eje central de las actividades que el Museo del Prado ha preparado para los escolares bajo el título 'El paisaje y sus enigmas'. Sin embargo, estos talleres infantiles van más allá de las obras del romántico inglés. Se estudiarán los orígenes del paisaje en la Edad Media y el Renacimiento de la mano de Mantegna, Cranach y Patinir, para continuar introduciendo a los pequeños en los escenarios recreados por Claudio de Lorena, Nicolas Poussin y Velázquez, entre otros, y acabar con la paleta cromática de Turner y sus contemporáneos. Todo ello de forma amena mediante cuentos, juegos y manualidades. Estas actividades se llevarán a cabo en la pinacoteca del 19 de julio al 30 de agosto en dos grupos, niños de 6 a 9 años y de 10 a 13 años, cada curso dura cuatro días, de martes a viernes, de 10 a 13.30 horas. El precio es de 80 euros.

'Un museo en movimiento' es el conjunto de talleres que el Museo Thyssen Bornemisza realiza para que los niños de 8 a 12 años aprovechen sus vacaciones estivales aprendiendo cine y arte. Los jóvenes directores tendrán a su disposición todas las herramientas necesarias para crear una película de animación partiendo de personajes, escenarios y narraciones inspirados en la pinacoteca. El precio de estas actividades es de 105 euros por alumno y se impartirán del 5 al 9 de julio y del 12 al 16 de julio del mismo mes de 10 a 14 horas.

Un viaje al siglo XIX a través de juegos y personajes decimonónicos es la oferta que el Museo Romántico propone a su público más joven durante el verano. 'Tú la llevas: juegos y juguetes de antes', es el título de la actividad dirigida a niños entre 8 y 12 años durante el mes de julio, que permitirá a los asistentes conocer cómo se divertían hace doscientos años quienes tenían su misma edad. En agosto, 'Damas y caballeros: La burguesía romántica' convertirá a los niños y niñas en auténticos nobles de la época enseñándoles sus galanterías, su moda y sus bTalleres en la Biblioteca Nacional.ailes. La duración de los talleres es de una semana de 9 a 14 horas. El precio es de 110 euros por niño. En julio también se puede participar un sólo día en las actividades de 12 a 14 horas por 20 euros.

El Museo del Traje se ha apuntado también a estos talleres de verano y ha organizado actividades temáticas gratuitas hasta mediados de julio. Descubrir los duendes y las hadas que habitan en el museo será el cometido de los más pequeños, de 5 a 8 años. Los mayores, hasta 12 años, aprenderán en 'Abróchate un traje' todas las maneras posibles de cerrar una prenda. Broches, cremalleras y botones serán los protoagonistas de estas actividades. La duración de cada taller es de dos días y el horario de 10.30 a 13.30.

Un verdadero campamento urbano es la apuesta del Museo del Ferrocarril para la primera o segunda quincena de julio. Talleres didácticos, excursiones en cercanías y visitas a la estación de Atocha y al AVE es lo que les espera a los pequeños que se decanten por esta opción. El precio es de 250 euros por niño y el horario de 8.30 a 15.30, incluye comida.

Los sábados de julio y los martes, jueves y sábados de agosto la Biblioteca Nacional también propone a los jóvenes veraneantes pasar un día de verano entre libros. Escribir sus propias historias y el casi desconocido pero valioso trabajo de un editor serán las enseñanzas que reciban los participantes. Las actividades están destinadas a niños de 7 a 12 años y comienzan a las once y media de la mañana.

Cuando los termómetros de la capital rozan los cuarenta grados, el Museo de América se convierte en un iglú y los niños pueden refrescarse trasladándose al Polo Norte. Bajo el título 'Descubriendo los pueblos del frío', esta institución propone conocer la forma de vida de los lugares más gélidos y las características naturales de estas tierras mediante disfraces, la grabación de una película, un taller de cocina esquimal y hasta una fiesta de la Aurora Boreal. El precio de las actividades es de 130 euros por quincena y el horario de ocho de la mañana a tres de la tarde.

Elena Gil | Madrid: Veranear en el museo, EL MUNDO, 8 de julio de 2010